Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Di Stéfano, bailando en la otra acera

7/7/14 | |

Millonarios 'El ballet azul'fotografía de el 11 de noviembre de 1950. Archivo fotográfico de Sady González, Biblioteca Luis Ángel Arango. Alfredo Di Stéfano, abajo, con el balón.