Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Tu propia sombra

25/10/13 | |

Fotografía de Federico Patellani (1911-1977).
CURRICULUM VITAE 
Blanca Varela

Digamos que ganaste la carrera
y que el premio 
era otra carrera
que no bebiste el vino de la victoria
sino tu propia sal

que jamás escuchaste vítores
sino ladridos de perros
y que tu sombra 
tu propia sombra fue tu única
y desleal competidora.