Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Juguemos, de Jodorowsky y Arrabal

29/7/05 | |

–Juguemos. Si yo soy un gran pianista...
–Si eres un gran pianista, y te corto un brazo... ¿qué haces?
–Me dedico a pintar.
–Si eres un gran pintor, y te corto el otro brazo... ¿qué haces?
–Me dedico a bailar.
–Si eres un gran bailarín y te corto las piernas... ¿qué haces?
–Me dedico a cantar.
–Si eres un cantante y te corto la garganta... ¿qué haces?
–Como estoy muerto, pido que con mi piel se fabrique un hermoso tambor.
–Y si quemo el tambor... ¿qué haces?
–Me convierto en una nube que tome todas las formas.
–Si la nube se disuelve... ¿qué haces?
–Me convierto en lluvia, y hago que nazcan las hierbas.
–¡Ganaste! Me sentiré muy solo el día que no estés.
–Si algún día te sientes solo, busca la maravillosa ciudad de Tar.

Alejandro Jodorowsky y Fernando Arrabal, Fando y Lis, 1967
Texto encontrado en el Hombre que comía diccionarios.
Un blog con portadas de Creepy y Vampirella.