Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Cecilia Meirelles y José Antonio Suárez.

8/1/07 | |

Retrato

Yo no tenía este rostro de ahora,

Tan calmo, tan triste, tan delgado,

Ni estos ojos tan vacíos,

ni el labio amargo.

Yo no tenía estas manos sin fuerza,

Tan quietas y frías y muertas,

Yo no tenía este corazón

Que ni se muestra.

Yo no advertí este cambio,

Tan simple, tan cierto, tan fácil:

¿En qué espejo se perdió

Mi rostro?

Cecilia Meirelles (Río de Janeiro, 1901-1964)

Traducción de Estela dos Santos.

Magazín Dominical de El Espectador, Nº 311, marzo 26 de 1989.

Obras de José Antonio Suárez.