Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

"Lo lamento, mento, miento...", y un alienígena

29/5/09 | |

Alienígena

Por un momento imagine no reconocerme. Que llegando de Venus surjo ante usted como un maniquí reflejado en la vidriera. Imagine que a pesar de ello percibió en mí un resto de vaga humanidad. Suponga un instante que su percepción y el reflejo son un antecedente mutuo y fraterno. Y por último -aunque se esfuerce en ignorarme- imagine por un segundo, que el maniquí es usted y que yo, -viniendo de Venus cual ser humano común y corriente- yo sí lo reconozco.
Juan Mihovilovich
La fotografía es de Celi.