Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Una inspiración

3/4/24 | |

UNA INSPIRACIÓN 
         
Esta mañana pensé que quizá
sólo el poema no publicado preserva su valor,
que publicarlo es arrojarlo
a un tiradero de basura a que se corrompa
junto con los asesinatos de la semana anterior y los resultados del futbol,
los precios de la bolsa, celebraciones sociales y declaraciones políticas.
La argucia me convenció. Velozmente lo mecanografié
y a un semanario muy conocido despaché estas líneas.

Michael Hamburger