Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

El león

28/9/05 | |

Mirando en la página de la Biblioteca Nacional de Francia, encontré esta interesante exhibición virtual sobre Bestiarios medievales.
" En la Biblia,
el león tiene a veces una imagen positiva (el león de Judas, los leones del trono de Salomón, el león de San Marco), a veces nefasta, cuando Sansón, David y Daniel tienen que enfrentarlo. Hacia el siglo XII, toma un aspecto positivo y suplee al oso como rey de los animales. Según los bestiarios, los cachorros nacen muertos, y es el padre el que los reanima a los tres días soplando sobre ellos (es un símbolo de la resurrección de Cristo el tercer día después de su muerte) ; por fin es un animal generoso que ataqua al hombre solo cuando tiene hambre. En la Edad Media, el león no puede ser considerado como un animal exótico : está presente en todas partes, en escudos, en capiteles de iglesias, en manuscritos, y, de modo muy real, en muchísimas casas de fieras. Al lado de las casas de fieras abaciales o principescas (como la de Carlomagno o, en el siglo XIV, la de Carlos V en el Hôtel de Saint-Paul), existen casas de fieras ambulantes, que recorren Europa de feria en feria".
Imagen: Guiard des Moulins, Bible historiale
Début du XIVe siècle
Troyes, Médiathèque de l'Agglomération, ms. 59, fol. 143