Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

Who's guilty?, the Golden ages

23/3/10 | |

The Golden ages, seriales con olor a naftalina y a calzoncillo de superhéroe:
"Las series eran una forma de película muy común en la primera mitad del siglo 20. Por lo general contaba con 15 o más episodios, y cada episodio terminaba donde el héroe (o heroína) se enfrentaban a una peligrosa situación, aparentemente sin solución, a fin de mantener la atención del público, lo que lo llevaría a la curiosidad de ver el siguiente episodio, y comprobar la forma en que el peligro sería superado. Los episodios fueron originalmente por semana, y siempre terminaba con una invitación al público a asistir a la próxima".