Es como la lluvia en una película muda, o como un barco en el fondo del mar, o como una galería de espejos a la hora de cerrar, o como la tumba del ventrílocuo mundialmente famoso, o como el rostro de la novia cuando se sienta a mear después de hacer el amor toda la noche, o como una camisa secándose en el tendal sin una casa a la vista… Bueno, vas pillando la idea. De 'El monstruo ama su laberinto', Charles SIMIC.

1280 de sangre y almas

8/6/13 | |

Pulp Covers + Book scans: curvas peligrosas, tacones imposibles, coches fúnebres, malandros engominados y sangre, mucha sangre.